La escritora Lucía Etxebarría ha anunciado a traves de una red social. Joder,esto de llamarles redes sociales a un patético invento de las telecos y sus afines me parece demencial,cuando no, un tanto prosaico. Tiene en su estructura gramatical un algo de social pero es un concepto de sociabilidad tan exigue y tan frágil que es como acusar al hombre del Neandertal de acabar con los dinosaurios a mordiscos. En fin, a lo que iba, esta señora se queja en la citada nota cibernética que deja de escribir por sus escasas ventas (de pago) y el aumento desaforado de las descargas en la red (gratis). Bien,está en su derecho,pero, ¿ alguien a notado que el mundo se pare por esta causa?. No creo,ademas, que nuestras letras se resientan de esta actitud; ni tan siquiera oteo en el horizonte de la narrativa contemporanea española sufra en demasía;y lo que es menos importante,yo ni siquiera sabía de su existencia (y esto no es mérito suyo).
Creo mas bien que es la pataleta de una niña mal criada que en una de esas rabietas obtusas se plantea hacer sonar su voz para confrontarla con los derroteros que está adquiriendo Internet en nuestro pais y que,para mas inri, los tribunales se estan poniendo de la parte de los usuarios.Ya sé que suena increible para algunos,entre los que me incluyo por ese excepticismo tan espeso que llevamos pegados al culo, pero de momento es así,¿será que anida todavía la cordura en algunas Audiencias? Y si fuese esta la causa contaría con mi aplauso aunque no sus razones `pero si al menos con mi simpatía por la valentia en defender sus posiciones. Por contra, lo único que ha conseguido es enfurecer a una masa solapada y granjearse el repudio de muchos de sus futuros lectores. Bueno,alguno como este servidor ya los tenía perdido de antemano.
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