Siento desulusionar a algunos,lo digo por el título del post,no voy a mencionar nada sobre la política actual ni la pasada,tampoco logicamente por el devenir. No,es sobre mi amigo que ya comenté sobre él hace unos dias. He pasado una tarde con él;hemos paseado por el pueblo;sin quererlo hemos ido comparando lo que era nuestra mirada de hace 25 años atrás y lo que hoy es la sociedad en la cual vivimos. Logicamente damos alguna que otra pincelada sobre la situación venezolana pero esto es lo de menos;lo más importante en esta tarde nebulosa son los recuerdos.Recuerdos de estudios pasados y compartidos;recuerdos de compañeros que ya no están o de lugares que yan han cambiado su fisonomía para siempre. Porque la vida se trata de eso:imperceptibles cambios para algunos pero grandes para otros que los contemplan así,de sopetón. Sé que le resulta díficil asimilar semejantes cambios pero lo que vé le gusta. La sociedad, esta que formamos los que vivimos aquí,le atrae. Observa nuestro devenir pausado,dice; mira nuestros pasos despreocupados como si supiesemos ciegamente a donde vamos y el porqué vamos. Yo lo miro incrédulo pensando en nuestras dudas que lo corroen todo;pero no digo nada,tan solo asiento con mi caminar. Vuelve a recalcar nuestra tranquilidad y el sosiego de nuestro caminar;alaba nuestra armonia y la elegancia de nuestro vivir diario.
Miró a mis adentros y sonrío al pensar que,tras su marcha dentro de unos dias,volveremos a ese boragine inacabada de prisas,de cosas inalcanzables y de crisis galopantes. Pero estas son otras historias, ¿o no?
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